El rápido crecimiento de la tecnología ha dado a determinadas plataformas digitales un poder y una influencia sin precedentes. La Unión Europea, en un acto de reconocimiento de la necesidad de regular esta situación, presentó la Ley de Mercados Digitales con el objetivo de fomentar un panorama digital más justo.
En este artículo se explican algunos aspectos de la Ley de Mercados Digitales, como sus objetivos, a quién se aplica y qué deben hacer las empresas designadas como “guardianes de acceso”.
La Ley de Mercados Digitales presenta un marco regulador para las plataformas que funcionan como guardianes de acceso en la economía digital. Son plataformas que:
El objetivo principal de la Ley de Mercados Digitales es impedir que estos guardianes de acceso impongan condiciones injustas a las empresas y los usuarios finales. Con esta Ley también se pretende garantizar que los servicios digitales fundamentales sean abiertos y accesibles. Por ejemplo, los guardianes de acceso deben permitir a los usuarios desinstalar fácilmente las aplicaciones preinstaladas y garantizar que los usuarios profesionales puedan acceder a los datos de rendimiento de sus las campañas publicitarias.
La Ley de Mercados Digitales no se aplica a todas las empresas, sino solo a aquellas a las que la Comisión Europea ha designado como guardianes de acceso. La designación se basa en tres criterios principales:
Las empresas que cumplan estos criterios pueden presentar argumentos para rebatir su designación y la Comisión también puede designar empresas según evaluaciones cualitativas.
✅ Los guardianes de acceso deben:
❌ Los guardianes no deben:
Tras su designación, los guardianes de acceso tienen un plazo de seis meses para cumplir la Ley de Mercados Digitales y presentar un informe de cumplimiento. Las obligaciones inmediatas incluyen el establecimiento de una función de comprobación del cumplimiento y la obligación de informar sobre las fusiones o adquisiciones previstas. El incumplimiento puede acarrear multas de hasta el 10% de la facturación global de la empresa o incluso de hasta el 20% en caso de reincidencia. En casos extremos, pueden aplicarse medidas correctivas adicionales, como la cesión forzosa.
En la Ley de Mercados Digitales se prevé la obligación de que los guardianes de acceso tomen las medidas necesarias para que sus plataformas de mensajería funcionen sin problemas con otras plataformas. Sin embargo, solo deberán hacerlo si así lo piden proveedores de servicios de menor tamaño. Cuando se designa oficialmente a una empresa como guardián de acceso, dispone de un plazo de seis meses para garantizar la compatibilidad de funciones sencillas (como la mensajería a nivel individual) con otros servicios. Las funciones más avanzadas, como los mensajes de grupo o las videollamadas, se introducirán progresivamente en un plazo de dos a cuatro años.
Es fundamental tener en cuenta que los proveedores de servicios de menor tamaño no tienen la obligación de garantizar la compatibilidad de sus plataformas. Además, los usuarios tienen libertad de elegir si quieren utilizar esta función de servicios cruzados. En la Ley de Mercados Digitales se garantiza que este cambio no afectará a la seguridad ni al cifrado de los datos.
En la Ley de Mercados Digitales se velará por que las grandes empresas tecnológicas proporcionen un acceso justo e imparcial a los mercados digitales, como pueden ser las tiendas de aplicaciones. Deben dar a conocer sus condiciones de acceso, y si hay desacuerdos, debe proporcionarse una forma alternativa para resolver las controversias.
La Comisión Europea ha puesto en marcha investigaciones a empresas como Microsoft y Apple para determinar si tienen la consideración de guardianes de acceso en virtud de la Ley de Mercados Digitales.
Algunas de estas investigaciones tienen el objetivo de rebatir las declaraciones de las propias empresas, que afirman que no deberían tener dicha consideración a pesar de cumplir los criterios. Otra forma de investigar esta situación consiste en examinar sistemas operativos específicos, como iPadOS, para comprobar si actúan como vías clave entre las empresas y los consumidores.
La Ley de Mercados Digitales y la Ley de Servicios Digitales son dos leyes diferentes con objetivos distintos.
Aunque ambas podrían aplicarse a un mismo servicio, la Ley de Mercados Digitales se centra en la creación de condiciones de competencia justas en los mercados digitales, mientras que la Ley de Servicios Digitales se ocupa más de las responsabilidades y los derechos de los usuarios y las plataformas online. No obstante, pueden complementarse en ámbitos concretos como la regulación de los anuncios online.
La Comisión Europea tiene la responsabilidad de garantizar el cumplimiento de la Ley de Mercados Digitales en todos los Estados miembros de la Unión Europea. Además, colaborará estrechamente con los organismos y tribunales nacionales para supervisar su cumplimiento.
Sí, si una empresa incumple las normas de la Ley de Mercados Digitales, los ciudadanos pueden denunciarlo ante los tribunales de su país para reclamar una indemnización.
Las leyes de competencia existentes pueden resolver algunos problemas, aunque son insuficientes para hacer frente a los retos particulares que plantean los mercados digitales. Ante esta laguna entra en juego la Ley de Mercados Digitales, que ofrece un enfoque más centrado con respeto a la regulación de las grandes empresas tecnológicas.
La Ley de Mercados Digitales opera en virtud del artículo 114, que tiene por objeto garantizar el buen funcionamiento del mercado único en toda la Unión Europea.
La Ley de Mercados Digitales está diseñada para que pueda adaptarse. La Comisión Europea está facultada para actualizar las normas a medida que evoluciona la tecnología, de manera que se garantice que sigan siendo pertinentes y eficaces.